UNASUR rechaza prorroga del decreto que define a Venezuela como una amenaza para Estados Unidos
Ante el aplazamiento del decreto emitido por Barack Obama en el que califica a Venezuela como una amenaza inusual y extraordinaria para su nación, la Unión de Naciones Suramericanas (UNASUR) rechaza nuevamente el decreto ejecutivo, por tratarse de "una amenaza injerencista a la soberanía y al principio de no intervención en asuntos internos de otros Estados".
La Unión de Naciones Suramericanas expresó en un comunicado difundido el pasado 6 de marzo, su rechazo ante la renovación del decreto que el presidente de Estados Unidos emitió contra Venezuela. Para UNASUR, dicho decreto desconoce la institucionalidad democrática de Venezuela, constatada previamente por la Misión Electoral de la UNASUR, en la elección de la Asamblea Legislativa realizada el pasado 6 de diciembre de 2015.
La decisión de Obama coincide con un clima de agravado conflicto político en Venezuela, donde la mayoría parlamentaria es ejercida desde enero de 2016 por la oposición al gobierno. Este hecho político ha acelerado el debate en la Mesa de la Unidad Democrática sobre los mecanismos para ejercer el cambio de gobierno.
En este contexto, UNASUR reitera el llamado que ha venido haciendo para el establecimiento de un diálogo institucional en Venezuela que permita a los ciudadanos conciliar y superar sus diferencias sin ningún tipo de intervención extranjera.
Recordemos que el 9 de marzo de 2015, el gobierno de los Estados Unidos decretó a Venezuela como una amenaza inusual y extraordinaria a la seguridad nacional y a la política del país norteamericano. Ante ello, el Consejo de Cancilleres de UNASUR reconoció el 14 de marzo de 2015, que el decreto constituía una amenaza a la soberanía de Venezuela y una amenaza al principio de no intervención en los asuntos internos de otros Estados.
El decreto ejecutivo constituye para el presidente venezolano, Nicolás Maduro, una agresión, y denuncia ante la comunidad internacional que esta agresión incita a los factores antidemocráticos y violentos de la oposición a atentar contra las autoridades legítimas y constitucionales de Venezuela.
El gobierno norteamericano ha recibido varias declaraciones de la comunidad internacional en las que se encuentra: UNASUR, ALBA, PETROCARIBE, MNOAL, G77 y la CELAC, quienes pidieron la derogación y no renovación de esta orden ejecutiva.
Por su parte, el gobierno venezolano ha decidido someter a revisión integral las relaciones con los Estados Unidos.
En 2015, Nicolás Maduro y miembros del chavismo mantuvieron reuniones con el diplomático norteamericano Thomas Shannon a fin de normalizar las relaciones entre ambos países. Sin avances diplomáticos hasta entonces, el presidente venezolano expresó su deseo de que Obama derogara las sanciones para emprender una nueva etapa de diálogo bilateral.
Fuente: Nodal - Noticias de América Latina y el Caribe